Transporte Activo Escolar

Basic Information


Brief Introduction:

El piloto principalmente fue aplicar la guía en establecimientos educativos de diversos contextos sociales y demográficos, con el propósito de fomentar la movilidad activa entre los estudiantes. A través de esta iniciativa, se buscó reducir las brechas de género, aumentar los niveles de actividad física y disminuir el sedentarismo en niños, niñas y adolescentes. Asimismo, se promovió la mejora de la convivencia escolar, el fortalecimiento de factores protectores de la salud mental mediante la participación en grupos diversos y el potencial impacto positivo en el rendimiento académico. Esta experiencia se desarrolló bajo el enfoque de "Salud en Todas las Políticas", promoviendo la articulación entre sectores para fortalecer el compromiso de establecimientos educativos, municipios y organizaciones de la sociedad civil en la implementación de estrategias que impulsen un transporte escolar activo, seguro y sostenible. Se realizaron cinco experiencias piloto de Transporte Activo Escolar (TAE), que se diseñaron en conjunto con el intersector que colaboro en la elaboración de la carta Gantt y los instrumentos (diagnóstico/PRE/POST/reporte semanal). Desde una perspectiva de salud pública, el programa se plantea como una herramienta efectiva para aumentar los niveles de actividad física regular de los escolares, fomentar una buena convivencia escolar y colaborar en la construcción del entono escolar activo. En términos ambientales, busca reducir la dependencia de los vehículos motorizados, disminuyendo así la contaminación del aire y la congestión vehicular. Además, el TAE promueve reforzar los vínculos sociales dentro de las comunidades escolares, promoviendo la interacción entre estudiantes y familias. Este enfoque integral también tiene apunta a tener impacto positivo en el ámbito educativo, ya que los estudiantes que llegan a sus escuelas después de realizar actividad física presentan mejor concentración y rendimiento académico. El piloto se implementó en las comunas de Temuco (Araucanía), Panguipulli (Los Ríos), Renca, Macul y Quinta Normal (Metropolitana), articulando al IND, MINDEP, MINEDUC, CONASET, SECTRA, USACH, OPS y a los equipos motores de los municipios.


Main Objectives:

Objetivo General: Pilotear la implementación de la Guía de Transporte Activo Escolar (TAE) 2024, promoviendo el uso del transporte activo entre los escolares de educación básica y media de las escuelas públicas de los municipios en la región Metropolitana, Araucanía y de Los Ríos, fomentando la movilidad saludable y segura, y fortaleciendo la colaboración entre la comunidad escolar y los municipios involucrados. Objetivos Específicos: 1. Incrementar la Actividad Física Diaria: o Fomentar el uso de modos de transporte activo (caminar) entre los escolares. o Reducir los niveles de inactividad física en la población escolar. 2. Mejorar la Seguridad Vial Escolar: o Implementar señalética y medidas de seguridad vial alrededor de las escuelas participantes. o Educar a los escolares y a la comunidad escolar sobre prácticas seguras de movilidad. 3. Fortalecer la Participación Comunitaria: o Involucrar activamente a la comunidad educativa y autoridades locales en el diseño y la implementación del piloto de transporte activo. o Fomentar la cohesión comunitaria y el sentido de pertenencia a través de la colaboración en el proyecto. 4. Evaluar el Impacto del Piloto: o Realizar un seguimiento y análisis de los cambios en los niveles de actividad física, salud y seguridad vial de los estudiantes. o Recoger datos y feedback para ajustar y mejorar la guía de transporte activo escolar. 5. Desarrollar un Modelo Sostenible y Replicable: o Crear un protocolo de implementación que pueda ser replicado en otras regiones del país. o Promover políticas públicas basadas en los resultados y aprendizajes del piloto para fomentar el transporte activo a nivel nacional. 6. Concienciar sobre los Beneficios del Transporte Activo: o Difundir los beneficios del transporte activo para la salud y el medio ambiente entre la comunidad escolar y la sociedad en general. o Utilizar los medios de comunicación y eventos locales para aumentar la visibilidad y el apoyo al proyecto.


Implementation/Activities:

Los pilotos se enfocaron en poder cumplir con los pasos de implementación de la Guía TAE. Los pasos 1,2 y 3 en agosto, donde los profesionales de los municipios y MINSAL se encargaron de conformar el Grupo Motor para el TAE dentro del establecimiento educativo, generar un diagnóstico de TAE y presentar un análisis de riesgos para conformar el plan de cada taller. Durante los meses de octubre, noviembre y diciembre, se desarrollaron los pasos 5 y 6 en donde se iniciaron los pilotos de TAE con una frecuencia semanal diaria; distribuidos en dos momentos (al inicio y termino de la jornada escolar) con la modalidad caminando en una ruta diseñada por cada equipo motor municipal con una extensión máxima de 2 kilómetros, la cual presento una estructura de 2 sesiones de 30 A 45 minutos aproximadamente al inicio de la jornada escolar AM y termino de la jornada escolar PM. Etapas desarrolladas durante la implementación de los pilotos: Etapa Inicial: Esta etapa se inicia el encuentro entre el profesional a cargo y el escolar acompañado siempre de un adulto responsable asignado en el lugar de origen acordado durante la etapa de planificación, previo mutuo acuerdo sobre el punto exacto del inicio/regreso del escolar y se mantenga una coordinación constante entre ambas partes. El escolar debe llegar puntualmente al lugar de origen para iniciar el trayecto seguro hacia la institución educativa. El profesional responsable del grupo esperará un máximo de 5 minutos antes de comenzar la ruta, previa notificación del adulto responsable de la demora. Etapa Principal: En esta etapa se llevó a cabo el traslado desde el punto de origen hasta la escuela y viceversa, que es desde la escuela hasta el destino final de cada escolar, dichos puntos estratégicos se identificaron en el paso de planificación. Fue imperativo que, durante el trayecto, todos los escolares apliquen las normas de tránsito que previamente se les ha instruido y sigan las indicaciones de los profesionales. En esta etapa los escolares se mantuvieron siempre con el cuidado de los 2 o 3 profesional responsable de guiar al grupo, resguardando que ningún escolar se adelantará o retrasará del grupo, asegurando que todos los miembros del grupo permanezcan juntos. Etapa Final: Esta etapa consistió en confirmar que el escolar ha llegado con seguridad al punto de origen y ha sido recibido por un adulto responsable previamente identificado. El profesional termina el recorrido al entregar el ultimo estudiante en el lugar acordado durante la planificación. Para evitar contratiempos, el adulto responsable del estudiante debió mantener una comunicación constante con el profesional.


Main Results:

La evaluación del Piloto de TAE permitió identificar hallazgos clave sobre su implementación, impacto y posibilidades de expansión. A partir del análisis de información cualitativa y cuantitativa, se evidencia que el programa no solo alcanzó sus objetivos principales, sino que también generó beneficios adicionales en la comunidad escolar, familiar y local. Su implementación ha demostrado ser una estrategia viable para promover la movilidad activa y el bienestar integral de niños, niñas y adolescentes, consolidándose como un modelo replicable en diversas localidades. El programa fue bien recibido por los actores involucrados, destacándose una alta motivación inicial. Un 57% de los participantes expresó entusiasmo por el programa, mientras que un 88% manifestó que tenía amigos inscritos, lo que favoreció la adherencia y el sentido de comunidad. Sin embargo, algunas familias expresaron preocupaciones iniciales sobre la seguridad en las rutas y la falta de información sobre el funcionamiento del programa. Estas inquietudes fueron abordadas mediante estrategias comunicacionales y el apoyo constante de coordinadores y monitores, quienes desempeñaron un rol clave en la vinculación entre familias y escuelas. Tras la implementación del piloto, el 54% de los participantes adoptó el transporte activo diariamente, consolidando cambios en sus hábitos de movilidad. Además, la percepción de seguridad en el entorno escolar mejoró significativamente: las opiniones positivas aumentaron del 37% al 57%, mientras que las negativas se redujeron del 31% al 18%. Estos resultados evidencian el impacto del programa en la confianza y seguridad de la comunidad escolar. A nivel familiar, el TAE representó un alivio en términos logísticos y económicos, reduciendo la necesidad de utilizar transporte público o privado. Además, promovió la autonomía infantil, un beneficio especialmente valorado en estudiantes con necesidades especiales. En el ámbito escolar, el programa contribuyó a mejorar la puntualidad y asistencia, así como la disposición de los estudiantes para el aprendizaje. En Temuco, el 65% de los participantes afirmó sentirse mejor gracias al programa. Asimismo, las caminatas grupales fortalecieron valores como el respeto, la colaboración y el trabajo en equipo, promoviendo una mayor cohesión social dentro de la comunidad educativa. El TAE logró establecer la actividad física como parte de la rutina diaria de los estudiantes. Antes de su implementación, muchos niños y niñas no realizaban ejercicio regularmente; tras el piloto, el 54% caminaba o usaba bicicleta a diario. En Macul, esta cifra alcanzó el 87%, reflejando la efectividad del programa en la promoción de hábitos saludables. El éxito del TAE radica en su diseño colaborativo e intersectorial. La participación de ministerios, municipalidades y escuelas permitió mejoras en infraestructura y seguridad vial, beneficiando a toda la comunidad. Su flexibilidad y capacidad de adaptación facilitan su replicabilidad en otras localidades, asegurando su sostenibilidad a largo plazo. En conclusión, el piloto del TAE demostró ser una estrategia efectiva, escalable y con un impacto positivo en la movilidad, la salud y la cohesión social, consolidándose como un modelo innovador para el desarrollo de políticas públicas en favor del bienestar infantil.


Limitations and Hindrances:

Si bien el piloto del TAE ha demostrado ser una estrategia efectiva y con alto potencial de replicabilidad, también enfrenta una serie de límites y obstáculos: 1. Seguridad vial y percepción de riesgo Uno de los principales desafíos identificados es la preocupación de las familias respecto a la seguridad en las rutas escolares. La falta de infraestructura adecuada, como veredas en buen estado, cruces seguros y señalización adecuada, puede generar riesgos para los estudiantes y desincentivar la participación. Aunque el programa ha contribuido a mejorar la percepción de seguridad, aún persisten barreras en ciertas comunidades donde la infraestructura vial es deficiente. 2. Barreras culturales y resistencia al cambio En algunas familias, la costumbre de utilizar transporte motorizado prevalece sobre la opción de caminar o usar bicicleta. Esto puede deberse a una percepción de mayor seguridad, comodidad o rapidez, así como a la falta de hábitos previos de movilidad activa. Cambiar estas conductas requiere un esfuerzo sostenido en educación y sensibilización, además de estrategias para demostrar los beneficios del transporte activo 3. Desigualdad en el acceso a infraestructura adecuada No todas las comunas cuentan con las mismas condiciones para implementar el TAE de manera eficiente. Mientras algunos han podido realizar mejoras en sus entornos escolares, otras carecen de los recursos para adaptar su infraestructura a las necesidades del programa. Esta disparidad puede limitar la expansión del TAE y su impacto en ciertos territorios. 4. Sostenibilidad financiera y compromiso institucional El éxito del programa depende en gran medida del financiamiento y del apoyo de distintas instituciones. Si bien el modelo de gestión colaborativa ha sido clave en su implementación, su sostenibilidad a largo plazo requiere financiamiento estable y el compromiso continuo de las autoridades locales y nacionales. Sin estos elementos, la continuidad del programa podría 5. Factores climáticos y estacionales El clima es otro factor que puede afectar la adherencia al programa. En zonas con inviernos fríos o lluviosos, la movilidad activa puede volverse menos atractiva para los estudiantes y sus familias. Diseñar estrategias que consideren alternativas para estos períodos, como la provisión de equipamiento adecuado (capas de lluvia, ropa térmica) o la adaptación de rutas seguras, es fundamental para garantizar la continuidad del programa. 6. Coordinación intersectorial y participación comunitaria Si bien la colaboración entre distintos actores ha sido una fortaleza del TAE, su implementación requiere un alto grado de coordinación entre ministerios, municipalidades, establecimientos educativos y familias. En algunos casos, la falta de claridad en los roles y responsabilidades puede ralentizar los procesos y afectar la eficacia. 7. Inclusión de estudiantes con necesidades especiales Si bien el TAE ha promovido la autonomía en algunos estudiantes con necesidades especiales, su implementación debe considerar adecuaciones específicas para garantizar la accesibilidad de todos los niños, niñas y adolescentes. Esto incluye mejoras en infraestructura, capacitación para monitores y estrategias de apoyo para escolares con alguna necesidad especial


Main Topics/Themes:

Environmental Health
Noncommunicable Diseases and Risk Factors
Mental Health
Social Determinants of Health
Data, Research, Evidence, Knowledge
Health Promotion
Adolescent Health/Youth


Effectiveness & Efficiency:

La implementación del piloto del TAE evidencia una administración eficiente de los recursos financieros, tecnológicos y humanos, optimizando su uso para maximizar el impacto en las comunidades escolares. A pesar de contar con una inversión moderada, el programa logró resultados significativos gracias a la optimización de recursos y la colaboración intersectorial. Se priorizó la redistribución de infraestructura existente, como la adecuación de rutas escolares seguras mediante señalización vial y mejoras en cruces peatonales, evitando costos elevados en nuevas construcciones. Además, la reducción en el uso de transporte motorizado representó un beneficio económico tanto para las familias como para los municipios. Aumento en la percepción de seguridad en el entorno escolar, pasando del 37% al 57%. A su vez se tuvo una reducción del uso de transporte motorizado, al 54% de estudiantes utilizando transporte activo diariamente, teniendo un ahorro de costos en transporte para las familias y disminución de la congestión vehicular en zonas escolares. El éxito del TAE se sustentó en el rol clave de monitores, coordinadores y comunidades escolares, quienes garantizaron la correcta ejecución del programa. La capacitación de monitores permitió reforzar la seguridad en las rutas y fortalecer la confianza de las familias, sin requerir una inversión excesiva en contratación de personal adicional. Logrando tener en convivencia escolar un impacto positivo en donde un 88% de los estudiantes indicó que la participación de amigos fortaleció su sentido de pertenencia. También se mejoró en puntualidad y asistencia, con estudiantes más motivados en clases y fomento de valores como colaboración, disciplina y trabajo en equipo en los trayectos escolares. En relación al aprovechamiento de recursos tecnológicos, aunque el programa no dependió de tecnologías avanzadas, el uso estratégico de herramientas de comunicación, como aplicaciones de mensajería, redes sociales y reuniones virtuales, permitió mejorar la difusión de información y fortalecer la coordinación entre familias, escuelas y monitores. Logrando una disminución de preocupaciones iniciales de seguridad mediante estrategias comunicacionales al utilizar el GPS de WhatsApp compartiendo la ubicación en tiempo real a todos los padres, pudiendo chequear todo el recorrido hasta el ingreso a la escuela. Lo que genero una mayor confianza de madres y padres en el programa gracias a la información clara y accesible y también fue muy fácil de usar el seguimiento y ajuste de rutas a partir del monitoreo constante de los trayectos escolares. El piloto del TAE logró una implementación eficiente de sus recursos, generando un alto impacto con un presupuesto optimizado. La combinación de colaboración intersectorial, aprovechamiento del capital humano y estrategias de comunicación efectivas permitió consolidar un modelo sostenible y replicable para promover la movilidad activa, mejorar la seguridad escolar y fortalecer la cohesión comunitaria.


Adaptability & Replicability:

El piloto del TAE ha demostrado una alta capacidad de transferencia de conocimientos y replicabilidad, gracias a su enfoque flexible, su implementación intersectorial y sus efectos positivos en la comunidad escolar. 1. Transferencia de conocimientos El TAE permitió la difusión de estrategias exitosas para fomentar la movilidad activa, promoviendo aprendizajes clave sobre seguridad vial, participación comunitaria y gestión intersectorial. A través de materiales educativos, capacitaciones y espacios de diálogo, se facilitó la transferencia de conocimientos a municipios, escuelas y actores sociales interesados en replicar la experiencia. En comunas como Macul y Temuco, el programa sirvió como modelo para fortalecer iniciativas locales de seguridad vial y hábitos saludables, extendiendo su impacto más allá de los participantes directos. 2. Potencial de adaptación y replicación El programa se diseñó con una estructura flexible y adaptable, permitiendo su implementación en distintos contextos socioeconómicos y geográficos. Su integración con políticas locales de salud y educación facilita su ajuste a las necesidades específicas de cada comunidad, asegurando su efectividad en entornos urbanos, semiurbanos y rurales. 3. Éxito en otros contextos El impacto positivo del TAE en las comunas piloto sugiere que su replicación en otras zonas podría generar beneficios similares, siempre que se resguarde la seguridad de los escolares. En comunidades con problemas de acceso a transporte escolar o altos niveles de sedentarismo, el programa podría ser especialmente beneficioso. En comunas con menor infraestructura vial, la estrategia podría complementarse con señalización especial o rutas supervisadas por monitores, garantizando condiciones seguras para los estudiantes. Desde nuestra perspectiva el TAE es una iniciativa escalable y adaptable, con un diseño que facilita su difusión y replicación en distintos contextos. Su enfoque en la movilidad activa, la seguridad y la participación intersectorial lo convierte en una estrategia sostenible para promover hábitos saludables y mejorar la calidad de vida de niños, niñas y adolescentes.


Sustainability:

La sostenibilidad del TAE se debe mantener mediante una estrategia integral que promueve la continuidad a largo plazo del programa, basándose en principios de colaboración intersectorial, fortalecimiento comunitario y adaptación a los contextos locales. 1. Colaboración intersectorial Uno de los pilares de la sostenibilidad del TAE es su diseño colaborativo. El programa involucra a actores clave de distintos sectores como salud, educación, deportes, seguridad ciudadana y vial, comunidades escolares locales y autoridades municipales. Esta colaboración fomenta un enfoque compartido y alineado hacia objetivos comunes, lo que asegura que las políticas y recursos destinados a la movilidad activa sean sostenibles. La participación de municipalidades, escuelas, familias y organizaciones de la sociedad civil fortalece el compromiso a largo plazo de todos los involucrados, garantizando la continuidad del programa. En Quinta Normal, se implementaron mejoras en infraestructura vial, como señaléticas en la ruta escolar, lo que no solo benefició a los participantes del programa, sino que también mejoró la seguridad para toda la comunidad, contribuyendo a la sostenibilidad a través de un impacto más amplio. 2. Fortalecimiento de la comunidad escolar El programa fomenta una cultura de movilidad activa que involucra a estudiantes, padres y docentes. Esta participación activa genera un sentido de pertenencia y compromiso, lo cual facilita que el programa siga vigente aún después de su implementación inicial. La formación de monitores locales y la sensibilización de las familias en torno a los beneficios de la actividad física diaria aseguran que el modelo se pueda replicar y adaptar a diferentes comunidades, sin depender de recursos externos constantes. 3. Adaptabilidad a distintos contextos El TAE es flexible y adaptable, lo que permite que se ajuste a diferentes contextos geográficos, sociales y económicos. Este diseño adaptable es clave para su sostenibilidad, ya que facilita su integración en una variedad de entornos, desde áreas urbanas hasta zonas rurales con recursos limitados. La posibilidad de ajustar las rutas, actividades y el apoyo logístico según las características de cada comunidad asegura que el programa pueda ser replicado sin grandes inversiones adicionales. 4. Impacto en políticas públicas El TAE contribuye a la implementación de políticas públicas de movilidad activa y bienestar a nivel local, regional y nacional. La vinculación con políticas públicas ya existentes y la promoción de infraestructuras de movilidad sostenible apoyan la creación de un marco normativo favorable para el transporte escolar activo. La promoción de hábitos saludables, como la reducción del sedentarismo y la mejora de la salud mental, fortalece la sostenibilidad al ser parte de estrategias más amplias en políticas de salud pública. El TAE ha demostrado ser una iniciativa sostenible gracias a su diseño colaborativo, adaptable y centrado en la comunidad. El compromiso intersectorial, la integración de mejoras en infraestructura y el fomento de hábitos saludables aseguran que el programa pueda mantenerse y replicarse en el futuro, beneficiando a las comunidades escolares a largo plazo.


Conclusion


What were the obstacles or challenges faced during the implementation of this good practice/initiative?

Durante la ejecución del piloto TAE se identificaron diversos desafíos que influyeron en su desarrollo y en la respuesta de la comunidad escolar. Estas barreras identificadas pueden servir como referencia para futuras implementaciones y estrategias de mejora. 1. Resistencia Inicial de las Familias Uno de los principales desafíos fue la preocupación de madres, padres y cuidadores sobre la seguridad de los niños en las rutas establecidas. Muchas familias expresaron temor ante posibles riesgos viales, inseguridad en el trayecto y falta de supervisión adulta. Se desarrollaron estrategias de comunicación con reuniones informativas, visitas guiadas por las rutas y participación activa de los monitores, lo que ayudó a generar confianza en el programa. 2. Falta de Infraestructura segura Algunas escuelas y comunidades no contaban con infraestructura adecuada para la movilidad activa, como veredas en buen estado, señalización adecuada y pasos peatonales seguros. Esto representó un riesgo para la seguridad de los estudiantes y dificultó la implementación del programa en ciertos sectores. En colaboración con municipios y comunidades escolares, se debe gestionar mejoras en infraestructura (como repintado de pasos de cebra y mejoras en iluminación) para hacer más seguras las rutas utilizadas por los estudiantes. 3. Coordinación Intersectorial y asignación de Recursos La ejecución del TAE dependió de la colaboración entre diferentes sectores (salud, educación, deporte, transporte y seguridad ciudadana). En algunos casos, la falta de claridad en los roles y la escasez de recursos financieros y humanos dificultaron la articulación efectiva de las instituciones involucradas. Se genero una orientación técnica y se promovieron mesas de trabajo intersectoriales para definir responsabilidades claras y estrategias de financiamiento, facilitando la ejecución del programa de manera coordinada.


What were the lessons learned for that will improve our expertise and add value to the Organization?

La implementación del Piloto de TAE ha generado importantes aprendizajes que pueden servir de referencia para instituciones nacionales y organismos de cooperación técnica, como la OPS o UNICEF, en la promoción de la movilidad activa y el bienestar estudiantil. 1. Enfoque Intersectorial: Clave para la Sostenibilidad La articulación entre diferentes sectores (salud, educación, deportes, transporte, seguridad vial y gobiernos locales) fue un factor determinante para el éxito del programa. Se recomienda que cualquier iniciativa similar fortalezca la coordinación entre actores clave desde la fase de planificación, asegurando una distribución clara de roles y recursos. La OPS puede promover mesas de trabajo intersectoriales en países interesados en replicar la iniciativa, asegurando que cada sector se comprometa con su implementación. 2. Comunicación y Sensibilización: Elementos Esenciales para la adherencia Uno de los desafíos iniciales del TAE fue la preocupación de las familias por la seguridad de las rutas y la falta de información sobre el programa. La implementación de estrategias de comunicación efectiva, incluyendo reuniones informativas, participación comunitaria y difusión de mensajes clave, permitió reducir las resistencias y generar confianza en el programa. Diseñar campañas de comunicación adaptadas a los diferentes públicos (familias, estudiantes, docentes y autoridades), utilizando canales accesibles y mensajes claros sobre los beneficios de la movilidad activa. 3. Participación Comunitaria: Clave para la apropiación del TAE El éxito del TAE radicó en la participación activa de las familias y comunidades escolares. La conformación de grupos de monitores y el involucramiento de docentes y padres generó una mayor apropiación del programa, favoreciendo su sostenibilidad a largo plazo. La OPS y otras instituciones pueden fomentar modelos de gestión participativa, donde la comunidad tenga un rol activo en la implementación y monitoreo de las iniciativas de movilidad activa. 4. Adaptabilidad y flexibilidad en la implementación Cada comunidad escolar presentó realidades y desafíos diferentes, lo que requirió ajustes en la planificación e implementación del TAE. La flexibilidad en la organización de rutas, puntos de encuentro y actividades complementarias permitió maximizar la participación y minimizar barreras de acceso. Diseñar iniciativas modulares y adaptables a diferentes contextos socioeconómicos y geográficos, permitiendo ajustes según las necesidades de cada comunidad. 5. Evaluación y uso de datos para la mejora continua La combinación de datos cuantitativos y cualitativos permite evaluar el impacto del programa y hacer ajustes estratégicos. La medición de indicadores como frecuencia de uso del transporte activo, percepciones de seguridad y hábitos de actividad física brinda evidencia clave para la toma de decisiones. Establecer mecanismos de monitoreo y evaluación desde el inicio del programa, asegurando la recolección de datos periódica para mejorar su implementación y justificar su continuidad ante tomadores de decisión. Las experiencias del TAE pueden ser replicadas y adaptadas en diferentes contextos, siempre que se consideren estos aprendizajes clave. La cooperación técnica de la OPS puede facilitar la expansión y fortalecimiento de programas de movilidad activa en la región, promoviendo políticas públicas basadas en evidencia y el compromiso de múltiples sectores.


Multimedia



Sources


https://dipol.minsal.cl/wp-content/uploads/2024/06/2024.06.18_TRANSPORTE-ACTIVO-ESCOLAR.pdf



DATES

Start: 2024-05-15
End: 2024-12-20

TYPE

Country/Territory Experience

SUBREGION

South America

COUNTRY

Chile

INSTITUTION

National/Local Government

STAKEHOLDER

Municipios

POPULATION GROUP

Mujeres y Hombres

INTERVENTION

Problem Solving
Innovation, New Opportunities
Capacity Building
Policy Development
Generation of Evidence

SDG TARGETS

Goal 3 - Target 3.4
Goal 3 - Target 3.6
Goal 4
Goal 5
Goal 11

CALLS FOR GOOD PRACTICES

Call for Good Practices in the Prevention, Control and Surveillance of Noncommunicable Diseases (NCDs)
Regional Office for the Americas of the World Health Organization
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